"Ni todos los hombres son malos, ni todas las mujeres son buenas"
Las mujeres son, sin duda alguna, lo mejor que ha pisado este planeta. Son INCREÍBLES, son fuertes, son hermosas, son la razón por la que se levantan en la mañana, por la que trabajan y por la que piensan que vale la pena vivir millones y millones y millones de hombres alrededor del mundo.
Mi madre me dio la vida y todo el amor incondicional que puede existir, mi hermana fue mi primer y mi mejor amiga, mis sobrinas son las personitas que más cariño y ternura me han hecho sentir, el amor por una mujer me arruinó la vida y aún así la recuerdo con todo el cariño del que soy capaz.
Son madres, son hijas, son sobrinas, son tías, son novias, son esposas, son empleadas y empresarias, son maestras y directoras. Merecen estar en un pedestal, merecen ser queridas y respetadas. Merecen el mundo, merecen el sistema solar y merecen el universo...
...pero no todas.
No por haber nacido mujer mereces el cielo, no por haber nacido mujer mereces ser llamada santa, no por haber nacido mujer mereces que todos se pongan a tus pies.
Al igual que todos, las mujeres tienen que trabajar por ser buenas, tienen que esforzarse por crecer, por madurar, tienen que subir escalones en la vida, en los estudios, en el trabajo.
Ser mujer no es un pasaporte para merecerlo todo sin esfuerzo previo.
Por lo que corrijo: Las mujeres son lo mejor que ha pisado este planeta... pero no todas.
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